8 feb 2008

Mamá y mamá, una filiación posible

Mis amigas Luisa y Nuria han decidido ser mamás.
Y más aún, han decidido convertirlo en un acto político, además de un acto de amor. Como ya hicieron con su boda, justo durante la visita del Papa Benedicto XVI en el V Encuentro Mundial de las Familias.
La experiencia supone, como podréis suponer valga la redundancia, un montón de trámites enojosos, esperas interminables y dificultades añadidas por el hecho de ser un matrimonio de lesbianas.
Actualmente, la ley permite que el hombre de la inseminación sea el marido. Pero en el caso de las mujeres (se sobreentiende solteras, no cabe la posibilidad de que una mujer sin un hombre no esté sola) el donante debe ser anónimo.
Resulta que Luisa tendrá que "adoptar" a su hij@ para poder constar como madre, siéndolo ya de derecho por su matrimonio con Nuria.
Hay un agujero en la ley en el que se está trabajando desde la militancia LGTB para conseguir cerrarlo. Si tenemos los mismos derechos hay que allanar los huecos de la administración, transformar incluso incluso la dinámica de instituciones, empresas y corporaciones, para que cumplan con la no discriminación a las personas LGTB.
Aquí tenéis su blog, porque estoy segura de que hay muchas parejas como la suya, angustiadas, preocupadas, incluso enfadadas ante las trabas, pero también profundamente emocionadas, empoderadas, enamoradas y luchadoras ante una de las experiencias más importantes en la vida de una mujer y que resulta de peculiar relevancia en este caso: es la experiencia más importante en la vida de DOS MUJERES.

Nuria y Luisa comparten su maravillosa experiencia contigo en:
http://www.mamaymama.blogspot.com/
(También la tenéis en "date un paseo")

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas gracias Angie. La verdad es que todavía nos quedan muchas cosas por hacer pero, con empeño y entusiasmo las conseguiremos. En eso estamos!!

Muchas gracias por tus ánimos y tus palabras de apoyo.

Besos.

Luisa Notario Villanueva dijo...

Estoy segura que con un gobierno favorable a nuestros derechos en el Parlamento, poco a poco iremos consiguiendo que esos flecos pendientes se vayan solucionando.

Ahora sólo esperamos que el 9 de marzo, el Congreso de los Diputados sea tomado nuevamente por la derecha más rancia y conservadora que nos quitará los derechos conquistados. En ese caso, es posible que ni siquiera tenga la oportunidad de poder adoptar a mi hijo/a.

Un beso grande

Luisa